Muchas expectativas había generado el anuncio de la entrega de los apartamentos de La Florida II en Motatán, construidos por la empresa privada y comprados a precio de remate por el gobierno nacional para ser entregados a los damnificados del estado. En opinión de algunos, la entrega de los mismos desde el programa Aló Presidente este domingo pasado sería oportunidad para que el Presidente Chávez le diera un espaldarazo al gobernador Hugo Cabezas. Para otros sería la confirmación de la ruptura de esa bella relación idílica entre Chávez y su “muchacho” Hugo Cabezas. Un colega periodista, director de un diario local, se atrevió a conminarme a una apuesta. Un lector anónimo me dejó en este blog el siguiente mensaje (copio textualmente, pues por allí medimos el nivel): “y como le quedo el ojo después del alo presidente del domingo cuerda de buitres”.
ASI ME QUEDO EL OJO
ASI ME QUEDO EL OJO
Pues el ojo me quedó igual como le debió quedar a Arias Cárdenas después de presenciar el pleito entre peseuvista trujillanos que se entromparon inmisericordemente cuando una valiente dama se atrevió a pedir la renuncia de Hugo Cabezas en sus propias narices, o sea, es decir, ese señor ha pedido todo respeto dentro de la militancia del partido. Bonita estampa la que se llevó el señor Arias Cárdenas para Miraflores.
Mi ojo terminó de dilatar la pupila cuando finalmente vi el tan anunciado y esperado “pase” desde el Aló Presidente del domingo 13 de febrero en tierras trujillanas.
Vi, en principio, a un Hugo Cabezas nervioso y tembloroso, como nunca antes lo habíamos visto. ¿Miedo escénico, acaso? ¿Miedo escénico en un hombre que todos los lunes se encadena por radio y televisión por más de una hora y dice a despotricar contra todo lo que no se arrodille a sus pies? O, más bien ¿miedo a que lo mandaran de nuevo a sembrar papas y le metieran otra tiempla producto del pleito que justo el día anterior militantes chavistas dieron en presencia de Arias Cárdenas? Así sería el temor de Cabezas…que dejó que Temístocles saliera en las toma, como demostrando a Chávez que las paces estaban hechas.
Finalmente no hubo tiempla, sí, hemos de admitir y reconocer; pero tampoco hubo el reiterado “yo lo felicito, al gobernador de Trujillo yo lo felicitó” de otras transmisiones. Ni tampoco hubo ese cálido “tocayo” que en otras ocasiones usaba Chávez cuando públicamente hablaba con Cabezas Bracamonte o se refería a él. El trato fue distante, displicente y hasta indiferente. Alguien me dijo: “no lo pateó porque Dios es grande y proteje al inocente”.
Para colmo de males, las tomas mostraron a muy pocos adeptos del proceso en las instalaciones. Las cámaras locales recogieron a unos escasos seguidores, a un grupito –supongo- de damnificados, pero nada de aquellas multitudinarias masas que solía concentrar Hugo Cabezas, y más si de un Aló Presidente se trataba. Y como si la serie de desaciertos no fuera suficiente, en su corto pase al aire, a Hugo Cabezas Bracamonte se le salió (sin querer queriendo) algo que Chávez había estado tratando de evitar a lo largo de su alocución: “…como estos edificios los construyó la empresa privada…”, añadió por allá el “Gober” de Trujillo. El malestar de Chávez era evidente, no le quedó de otra que disimular argumentando que esos apartamentos los compró el gobierno a un precio razonable.
De suerte que, mi estimado lector anónimo, si por lo anterior no puede sacar conclusión de cómo me quedó el ojo, le pregunto yo ahora entonces: ¿Cómo vio usted el vaso, o medio lleno o medio vacío? Habrá quienes vieron el vaso medio lleno, como de seguro usted; pero otros lo habrán visto medio vacío. Algo sí queda claro: el vaso está medio, no completo. Una última cosita: No hablé yo de carroña para que me venga a llamar buitre.
LIBERTAD DE EXPRESION SEGÚN ESTE REGIMEN
Al dirigente político y estudiante de Comunicación Social del NURR Carlos Cegarra le han suspendido su programa radial de Paisana 92.5 FM. La orden vino de la propia voz del Presidente de la Emisora, el periodista Jairo Quintana, quien también es director de Turismo, interventor de las instituciones culturales del estado y cuñado del Gober. Así lo refiere el mismo Cegarra a través de una carta pública que puso a circular electrónicamente. ¿Cuál fue el pecado de Carlos Cegarra? No creerán lo que voy a decir pero les juro por mis santos hijos que es tal cual, porque fui testigo de excepción. Simple y llanamente, Carlos Cegarra, militante disciplinado del PSUV, simpatizante del proceso chavista, se atrevió decir en un foro sobre la reforma a la Ley de Universidades que él COINCIDIA CON LA OPINION DEL PRESIDENTE CHAVEZ, cuando éste dijo que la Ley de universidades aprobada por la Asamblea Nacional en diciembre era un texto anti autonómico, antidemocrático e inaplicable; y que por tal la tenía que vetar.
Me consta que eso fue lo que dijo el joven, y así lo reseñó la prensa. ¿Pero, estar de acuerdo con Chávez es un pecado ahora para los peseuvistas? ¿O es que es completamente falso lo que dijo Chávez a la nación cuando vetó la ley, y hay un mensaje oculto que solo descifra la militancia, según el cual esa negación es en el fondo una afirmación soterrada?
Tal como titula Cegarra su carta, se está criminalizando la opinión libre, pero que en este caso es la misma de Chávez!!! Por dios, no se entienden, o al menos, que así de ese tamaño sea el pleito de Hugo Cabezas con Hugo Chávez.
1 comentario:
Que especulaciones tan grandes se dicen aquí. Y usted es profesora de periodismo? Con razón hay tanto periodista mediocre y manipulador!
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